A horas de que cambie el mes en el calendario, aún no está claro que va a pasar a partir del 1° de setiembre con el boleto integrado en las líneas que su recorrido no atraviesa la General Paz o el Riachuelo. El gobierno de Milei asegura que no continuará subsidiando las combinaciones en esos recorridos y el gobierno de CABA no ha confirmado que se hará cargo. Disputa por el traspaso de las 31 líneas

El Gobierno de Javier Milei anunció que a partir de septiembre dejará de financiar el boleto integrado de la Red Sube en los colectivos que circulan exclusivamente en la provincia de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Es decir que aquellos que cruzan el Riachuelo o la General Paz, aunque sea por un par de cuadras, continuarán contando con ese subsidio.

Esto implica para los porteños que las 31 líneas que no salen en su recorrido de la CABA dejarán de contar con el descuento que se produce automáticamente con la SUBE registrada, de un 50% en el segundo viaje realizado entre los 2 minutos y las 2 horas del primero y de un 75% en el tercer viaje realizado antes de las 2 horas del primero.

Las líneas que dejarían de recibir este beneficio son: 4, 6, 7, 12, 23, 25, 26, 34, 39, 42, 44, 47, 50, 61, 62, 64, 65, 68, 76, 84, 90, 99, 102, 106, 107, 108, 109, 115, 118, 132 y 151. Como se observa son varias las líneas que atraviesan las Comunas 11 y 15, muchas veces utilizadas para hacer combinación dentro de la trama del Metrobus o con el Subte; 34, 42, 44, 47, 76, 84, 106, 17, 108, 109.

Los datos del sistema SUBE indican que de casi 9 millones de viajes que se realizan en el AMBA, el 78% es único, uno de ida y otro de vuelta. El 22% restante es múltiple y, según que colectivo se tenga que tomar, sufrirá un nuevo golpe al bolsillo equivalente a un aumento de entre un 25% a un 40%, salvo que la Ciudad se haga cargo de la diferencia.

No será el único costo a cargo de los usuarios, porque los empresarios ya anunciaron que dada la caída en el transporte de pasajeros, que ronda el 23% interanual, y la falta de actualización de los montos subsidiados, evalúan retirar colectivos de circulación y disminuir las frecuencias, por lo que el viaje costará más tiempo.

Por su parte, el vocero presidencial Manuel Adorni confirmó ayer que el gobierno nacional traspasará por decreto las 31 líneas de colectivo que circulan únicamente por la Capital Federal al distrito que gobierna Jorge Macri y sostuvo que la cuestión tarifaria es «una cuestión de cada distrito». Jorge Macri a su vez, avisó que no está dispuesta a convalidar ese traspaso y responsabilizó a la administración nacional por cualquier posible paro de transporte en caso de que se corten recursos a las empresas.

Este es otro eje de tensión entre ambas administraciones, que se suma al pago de la coparticipación por goteo y a la deuda que el gobierno de Javier Milei acumula con la Ciudad de Buenos Aires desde el mes de enero a esta parte.