Fernando Sureda padecía ELA desde 2016. En 2018 lo diagnosticaron y en 2019 alza su voz para reclamar un marco legal para la eutanasia en su país, Uruguay. En paralelo a su reclamo, desde su cama de enfermo terminal entabla un diálogo por Zoom con Enric Benito, un médico español especializado en cuidados paliativos. El documental uruguayo de los hermanos Ponce de León retrata el proceso de transformación que se da en ambos protagonistas, entre los que nace una inesperada amistad. Es una producción española-uruguaya ya estrenada en ambos países y que llega a Buenos Aires en la sala Cacodelphia a partir del domingo 23 de febrero

El próximo domingo 23 de febrero a las 19 horas, en el cine Arte Cacodelphia de la Avenida Roque Sáenz Peña 1150, se estrenará “Hay una puerta ahí”. El documental es una producción española-uruguaya de los hermanos Facundo y Juan Ponce de León basado en horas de diálogo entre Fernando Sureda, enfermo terminal transitando las últimas etapas de ELA y Enric Benito, médico español residente en Málaga.

Fernando Sureda fue gerente de la Asociación Uruguaya de Fútbol y padeció Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) desde 2016, aunque se le diagnosticó en 2018. En 2019 se encontraba en internación domiciliaria con cuidados paliativos. Por lo que sabía y por lo que venía transitando con su enfermedad estaba completamente convencido de querer la eutanasia y pelea por sacar la ley en Uruguay y por ser el primero en aplicarla. En ese camino, el 20 de octubre de 2019, tiene una primera charla por Zoom con Enric Benito (*), un médico español de renombre internacional especializado en cuidados paliativos.

Terco, obstinado, Sureda comienza esta serie de diálogos en los que ambos van exponiendo sus puntos de vista y el paciente va descubriendo un mundo posible y digno de ser vivido desde esos mínimos movimientos a los que lo va limitando la enfermedad. Nace una rutina entre ambos con diálogos en los que no se escatima el humor del bueno ni el mal humor. El trabajo de Juan y Facundo Ponce de León es admirable. Logran sintetizar en 80 minutos la transformación de paciente y médico y el nacimiento de una inesperada amistad vivida durante horas de diálogos.

La película tiene la virtud, entre otras, de instalar en la audiencia la misma discusión que se da entre ambos protagonistas llamando a las cosas por su nombre. Sureda se define como “el paciente terminal más sano del mundo”y enfrenta su muerte con absoluta claridad, lo que le permite hablar de ella y de sus creencias. Sin embargo, con el correr de los encuentros muchas de las certezas sobre el mundo afectivo que lo rodea se derrumban. Se trata de un diálogo descarnado y tierno donde se abordan conceptos como la muerte, el misterio del más allá y el derecho humano a cuidados paliativos integrales que incluyan el derecho a decidir sobre el final de su propia vida.

Es un documental que logrará la atención durante 80 minutos y dejará un final inesperado. Además de una mochila de argumentos y valores a la hora de pensarse o pensar a un familiar en su etapa final. Se exhibirá en Cacodelphia a partir del domingo 23 de febrero y todos los domingos de marzo a las 19 horas.
Entradas:https://cineartecacodelphia.com.ar/pelicula/86/6a18b2dbdb80259d67bca0390bae48d5

(*) Enric Benito es español, médico oncólogo desde 1976 y vive en Málaga. Realizó el Máster en Cuidados Paliativos en la Universidad de Barcelona en 2000. Entre otras cosas fue el Coordinador del Programa Autonómico de Cuidados Paliativos de las Islas Baleares entre 2010 y 2017 y coordinador del Grupo de Espiritualidad de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL) entre 2006 y 2015. Es miembro de Honor de la SECPAL desde 2014. Actualmente es profesor invitado en varias universidades españolas, portuguesas y de América Latina

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