En la mañana de ayer, con la presencia de funcionarias y funcionarios comunales y de la ciudad, se oficializó la apertura del Centro Integral de la Mujer María Gallego, en el barrio de Devoto. El espacio, cerrado durante la pandemia, lució renovado y puesto a tono con los colores distintivos de los feminismos. La reapertura significa recuperar para la presencialidad un espacio integral de contención, patrocinio y asesoramiento para las mujeres de la Comuna 11

El miércoles 25 de agosto reabrió sus puertas el Centro Integral de la Mujer María Gallego, en Francisco Beiró 5229. Ayer, se oficializó esa reapertura con la presencia en el local de funcionarias de la Dirección General de la Mujer, encabezadas por su directora, Carolina Barone y del presidente de la Junta Comunal 11, Nicolás Mainieri.
El local fue compartido, hasta las medidas tomadas por la pandemia, con el Centro Social Zonal 11 y ahora ha quedado para uso exclusivo del CIM, por lo que se cuenta con mucho más espacio. Pero esa no es la única novedad, porque luce renovado, luminoso, espacioso y envuelto en los tonos violetas distintivos de los feminismos.

“Aquí, en la esquina de Beiró y Alta Gracia, en el barrio de Devoto, las mujeres se van a encontrar con un equipo interdisciplinario que va a estar de lunes a viernes. El proceso es: la mujer se acerca o puede llamar por teléfono o puede pedir un turno o puede hacer una presentación espontánea, tocar la puerta del CIM e ingresar. Allí le van a preguntar qué es lo que ella necesita. Ella va a poder contar en un marco de absoluta confidencialidad lo que está viviendo. Se hace una admisión y a partir de esa admisión se evalúa el nivel de riesgo y se le ofrece a cada mujer lo que esa mujer necesita. No hay una receta única para todas las mujeres. Cada mujer para nosotros requiere un abordaje integral y acá se va a encontrar con eso, con un equipo que la va a abrazar, que la va a acompañar, que la va a escuchar y que le va a abrir las puertas a una nueva vida”, explicó Carolina Barone en diálogo con Hormigas y Cigarras.
Barone asumió como directora del área en mayo de este año, es Licenciada en Gobierno y Relaciones Internacionales y como uno de sus desafíos para esta etapa señala el paso de la virtualidad a la presencialidad en los servicios que brinda la CABA a las mujeres.

Para Nélida Sisini, Trabajadora Social de la Dirección General de la Mujer presente en el acto,
“Esta reapertura significa una boca más de accesibilidad a las mujeres, en este caso de la comuna, del barrio, que estuvieran atravesando alguna situación de violencia.”. A su vez consideró que fue un “triunfo que haya ocurrido esto, porque la verdad es que el centro estaba en muy malas condiciones, estaba muy deteriorado y me parece que jerarquizar y poner a punto los Centros de la Mujer, no solamente impacta, y es un derecho, a las trabajadoras, sino también a las mujeres que se asisten”

Expresiones como triunfo o victoria relacionadas con la transformación edilicia del CIM María Gallego se repitieron durante la mañana y dieron cuenta de la lucha que llevaron adelante las trabajadoras para que estas transformaciones se produjeran. Una lucha que identifican se da contra los bajos presupuestos y donde para romper el corsé impuesto, ponen el cuerpo, como testimonian en este caso, puliendo los pisos o aportando plantas y colores al espacio.

El CIM recibe a las vecinas que lo requieran entre las 9 y las 16 horas, de lunes a viernes. También se puede llamar por teléfono al 4568 -1245 o comunicarse por correo electrónico a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Quienes acudan, ya antes de ingresar serán recibidas por un mural inmenso, lleno de mariposas. Durante la mañana armamos una suerte de collage sonoro de opiniones respecto al simbolismo de las mariposas que comienza en el vínculo con las “hermanas Mirabal, las famosas mariposas latinoamericanas que fueron asesinadas. En las cuestiones de género, simbolizan una lucha permanente en la búsqueda de derechos, un rechazo permanente a todo lo que es femicidio” y recorren otros aspectos: “Las mariposas hablan de libertad, de capacidad de transformar, de capacidad de poder tener vidas diferentes. Vidas con más accesibilidad, con más equidad, con más igualdad. Vidas que no estén subsumidas, como en este caso que nos convoca, a la violencia, a relaciones de asimetría de poder. De maltrato. Que simbolizan que una mujer cuando ingresa (a un CIM) atraviesa todo un proceso de transformación hacia la libertad.”
HyC

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